Un libro amoroso
La
tarde de otoño se sentía demasiado veraniega. Mis nietas de 2 y 5
años me esperaban en el patio de su casa. Llegué con una bolsa
llena de libros como suelo hacer habitualmente. Les ofrecí la opción
de elegir por cuál les gustaría empezar luego de colocarlos en
forma de abanico, sobre una mesa. En otras ocasiones, introducen las
manos en la bolsa y tapándose los ojos, sacan uno al azar. Es
decir que en el preámbulo de la lectura hay juego y del más
variado.
¿Cuál
habrá sido la razón que las llevó a decidirse por Con
sombrero y sin
bigote
de Magdalena
Helguera? Creo que en la lectura de esta nota se encuentra la
respuesta y así como hice una previa selección en casa, supongo que
a ellas les habrá parecido divertido el título o los colores
sugerentes de la tapa, o tal vez que ya conocieran la colección y
les consta que en una de las solapas están los personajes del cuento
y en la otra, un montón de títulos que tienen en su propia
biblioteca.
Este
libro está dedicado a las abuelas de la autora. Y resulta que me
encuentro en esa situación. Lo digo porque cuento con la misma
diplomatura. De ahí, que de inmediato haya aparecido la nubecita de
los cómics con el término “amoroso”. Dice la etimología:
vocablo proveniente del sustantivo amor
y del sufijo oso
que indica
abundancia o relativa de él. Afirma el diccionario: se dice de la
persona que siente mucho amor y que lo transmite de manera afectuosa,
amable, cariñosa y entrañable.
Esta
es la historia de Serafín, un niño que tiene mucho amor para dar.
El problema es que es un poco distraído, motivo determinante para
verse involucrado en situaciones que lo confunden. Como también es
muy alegre, no le hace ninguna gracia toparse con personajes
malhumorados. Estos des-encuentros motivan a querer seguir la
narración página a página. En el camino de Serafín hay viento,
hay sol y es invierno. Pero no se trata de un libro “para trabajar”
la estación más fría del año, sino de rescatar los afectos y
destacar los vínculos filiales. Porque la culminación encarna el
encuentro feliz, pleno, inmenso, de un nieto con su abuela.
Cabe
señalar que Con
sombrero y sin bigote es
la suma del texto de Helguera y las ilustraciones a doble página de
Oscar Scotellaro. Ambos profesionales se embarcan en una nave
indivisible, sustancial, en la que exhiben su genuino amor por la
literatura infantil.
La
tarde de otoño en el patio de la casa de mis nietas resplandeció.
Martina y Josefina pedían que les contara una y otra vez, y otra vez
más, el cuento. Por si fuera poco, un vecinito del edificio lindero
con la nariz pegada a la ventana entreabierta del octavo piso,
aplaudió pidiendo más.
La
recomendación de la editorial va para niños desde los 3 años. Por
mi experiencia siempre le rebajo algo. El alborozo y goce a partir de
esta lectura me dan la razón✤
Con sombrero y sin bigote. Magdalena Helguera. Ilustraciones de Oscar
Scotellaro. Sello Loqueleo. Santillana. Primera edición: agosto de
2016. Montevideo, Uruguay
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